187 familias de la comuna comienzan a materializar el sueño de la casa propia
- Con la ceremonia de primera piedra comenzó oficialmente la construcción del proyecto habitacional del comité de vivienda Futuro en Nuestras Manos, el que contempla casas de dos pisos, en tres alternativas de diseño, además de espacios comunes que fomentan el encuentro comunitario.
“Para nosotros es como un sueño cumplido, porque de aquí en adelante sabemos que el camino es más corto, así que estamos contentos y felices”, explicó Cristian Castillo, quien junto a su familia asistió a la ceremonia de primera piedra del proyecto habitacional Futuro en Nuestras Manos, el que se construirá en el sector de El Consuelo en Salamanca Urbano. “La casa propia es muy importante para nosotros como familia, es el comienzo para nuestra vida juntos, nuestro hogar. Un sueño hecho realidad”, agregó emocionada su esposa Wilma Sarmiento.
Ellos son parte de las 187 familias que contarán con su casa propia luego de 15 años de espera. Una iniciativa que se materializa gracias al trabajo en conjunto del Ministerio de Vivienda y Urbanismo, y del Programa Somos Salamanca, alianza de colaboración entre Minera Los Pelambres, la comunidad y el municipio local.
“Es súper importante para nosotros como provincia esta alianza púbico-privada que es el Somos Salamanca, para que las familias finalmente tengan su vivienda propia. Como Gobierno es muy importante que las familias se vayan desarrollando, porque eso significa calidad de vida. Así que estamos muy contentos”, comentó Juan Pablo Gálvez, gobernador de la Provincia de Choapa.
El conjunto habitacional contempla la construcción de tres tipos de vivienda, todas de dos pisos, con valores que oscilan entre 1.000 y 1.254 UF, y que cuentan con un monto subsidiado por el gobierno. El proyecto también considera un trabajo de urbanización total del sector de El Consuelo, el que incluirá nueva vegetación, luminaria y una sala multiuso para todas las familias del sector, con el objetivo de fortalecer la convivencia entre vecinos.
“Esto refleja muy bien el espíritu que está detrás del Somos Salamanca, que es el esfuerzo conjunto para lograr objetivos comunes. Creo que estamos en la senda correcta al apoyar políticas públicas que apuntan a mejorar las viviendas sociales. La posibilidad de que una empresa minera pueda hacer aportes desde lo técnico para beneficio social, a través de un esfuerzo conjunto con el municipio, nos tiene muy orgullosos”, explicó Rodrigo Lotina, jefe de Asuntos Públicos provincial Choapa de Minera Los Pelambres.
Por su parte, el alcalde de la comuna destacó los buenos resultados que se obtuvieron gracias al trabajo conjunto. “Es un gran logro para las familias. Creo que el trabajo de todos estuvo muy bien, tuvimos momentos muy difíciles, pero, sin embargo, con la ayuda de todos, la directiva, la minera, el Serviu y la municipalidad, por fin se pudo lograr. Me parece muy bien seguir avanzando en el tema de viviendas, aportando a la construcción de más viviendas para las familias vulnerables de la comuna”, comentó Fernando Gallardo, alcalde de Salamanca.
La primera etapa de diseño y la posterior postulación del proyecto habitacional al Servicio de Vivienda y Urbanismo fue realizado con el apoyo del Programa Somos Salamanca, mientras que el diseño final y la construcción de la obra, la que se espera sea entregada dentro de dos años, está a cargo de la empresa constructora Santomas.
“Es un logro de uniones, de alianzas, porque solos la verdad es que no podíamos. Sentimos satisfacción y emoción, es un ir y venir de sentimientos, porque pasamos por hartas cosas y tuvimos que enfrentar hartos obstáculos, muchas veces nos tuvieron que tomar de la mano para seguir adelante. Entonces estoy satisfecha y feliz y no por mí, sino por las otras 186 familias que represento. Este esfuerzo no es mío, es un éxito de todos”, señaló emocionada Texia Vargas, presidenta del comité de vivienda Futuro en Nuestras Manos.
Los vecinos quisieron cerrar la ceremonia de primera piedra con un acto simbólico tradicional en la provincia, en el que esparcieron agua, sal y cuarzo en parte del terreno con el objetivo de purificar el lugar y atraer buenas energías para su construcción.